Yo debí haber nacido muerto
Yo debí haber nacido muerto
En medio de la empapada atmosfera azul,
Refregando en mi rostro el cruel destino de morir por mil días
Como un sacrificio eterno y firme en una cruz de agua.
Yo debí haber nacido muerto
Porque de esa manera ahorra angustia el universo,
Militando en la sabana fría de un preámbulo indefinido,
Como un martirio constante que navega mis sienes.
Yo no debí haber nacido
Porque el cenit de mis sueños se ha enmudecido,
Aventurando mis caminos al precipicio de mi boca sangrante
Como la ultima cena en la que descubrí al traidor.
Emanuel N. Soverchia
Viernes 10 de abril de 2009
1 comentario:
Muy triste este poema emanuel, mejor nacer vivo, si no no hay batalla posible. Saludos revolucionarios.
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